Puedo esta vigilia disolverme en el agua señores…
Puedo, esta vigilia, disolverme en el agua,
señores de salón, y, mientras, alcanzar
el maduro desorden de sus guerras…
y comprender los infantiles pensamientos
de esos seres, cuya fábrica de buena fe
ilumina nuestras condenadas cabezas
con el cisma infeliz de los poetas.
En el azul, como
lluvia de primavera
penetra las rocas.
blanco rocío,
tu ropa sin doblar
ya nadie la recoge
sin teñirse,
el gran bosque sería
como un recuerdo
en este bosque
no encontrará ningún árbol
entre retoños
No sólo el ruiseñor
sufre desengaños
todas las noches.
Como cada mañana,
¡memorias del viento,
ojos en la escarcha!
¡No hay telegramas hoy!
¿Adónde va pensativa
la primavera?
Tarde de estío:
cada pincho de la zarza
penetra a una mora.
Tú en esta choza,
cada pincho en la zarza
y canta el ruin-señor.
iluminación, iluminación…. es lo que necesito… iluminación
“La evaporación de los pensamientos forman luego nubes y lluvias ácidas de lágrimas”…
mira bien, mira bien
en primavera
evitándolo