Jajajaja, eso es que los miras con buenos ojos, despejados de lágrimas y prejuiciosas lentes y con mucho mucho benevolente afecto.
Mañana me voy a Asturias. Ya te cuento. A ver si encuentro tiempo y te comento alguno de tus textos. Ahora voy a acabar de pergeñar mi discurso de acción de gracias.
Eres ya todo un Haijin, Manuel, sólo te falta acompañarlo de un Haiga para entrar en las grandes esferas de su cultivo
Jajajaja, eso es que los miras con buenos ojos, despejados de lágrimas y prejuiciosas lentes y con mucho mucho benevolente afecto.
Mañana me voy a Asturias. Ya te cuento. A ver si encuentro tiempo y te comento alguno de tus textos. Ahora voy a acabar de pergeñar mi discurso de acción de gracias.
Un abrazo inmenso como siempre.
Mucha suerte, en tu desvirgar poético ante la sociedad, pues ante los amigos y ante la belleza ya lo hiciste.
Las lágrimas son la impotencia por no poder ser cascadas.