CARLOS GAYOL
La noche empezaba a tragar el bosque cercano. El pesado aliento de la niebla otoñal se acercaba húmedo y sigiloso. Salió al pequeño cementerio de la iglesia. Ya nadie se ocupaba de él. Y deseó morir. Un repentino vértigo se apoderó de sus vísceras. Estaba a punto de desmayarse. Sus rodillas se clavaron en el suelo, su frente sobre una lápida. En su amplio mentón se imprimieron las primeras letras inscritas en una abandonada tumba: SOL…
Me acabo de percatar que esto es una hallowinada pedorra, pero ya no voy a cambiarlo, forma parte de la novelota esta por entregas -en clave “florida”- que me ha dado por continuar hasta que la muerte nos separe (jo otra vez he dicho muerte, mierda! si es que los niños no me dejan escribir con tanto “susto o muerte”, ya no sé ni lo que hago, mierda otra vez!)
Venga anda, sigue con la paranoia, que a mí ya me tiene intrigado el asunto. Ah!Y no me olvido del meme, todo tiene su tiempo. “!!!!!!!!!zuzto o muette!!!!!!!!”
Mi intención es escribir un post al día sobre este tema durante un año (365 post, más o menos). Cada uno de ellos será una página de la novelota y, a la vez, un microrrelato independiente con su propio final. Por tanto, popi, espero mantener la intriga (o el dolor de barriga) de esta paranoia hasta dentro de un año, mientras tanto habrá que conformarse con los microfinales.
Me agrada la idea, siempre y cuando al acabar la novelota no te dé por cambiar de orden cada microrrelato y nos desafíes a resolver otro meme. 🙂
Pues me has dado una idea, jejeje, quizás lo haga… 😆 por cierto, sobre lo del meme, te aconsejo que lo mutes, es decir, que le hagas alguna mutación 😛