Poder comer algo, poder comer algo… ¿sólo algo?. ¡Quiero comerme la vida entera!. ¡A dos carrillos! que vengo con hambre atrasada (uf!, cómo me suena -parada técnica para rebuscar entre mis recuerdos sonoros que esto suena a canción- …………………………………………………….. ¡¡¡Aute!!!)
Sí, los placeres gratificantes del cuerpo siempre son buenos. Lo reconfortan a uno, si el otro también participa.
Gracias por tus visitas.
Poder comer algo, poder comer algo… ¿sólo algo?. ¡Quiero comerme la vida entera!. ¡A dos carrillos! que vengo con hambre atrasada (uf!, cómo me suena -parada técnica para rebuscar entre mis recuerdos sonoros que esto suena a canción- …………………………………………………….. ¡¡¡Aute!!!)